Contrario a lo que la gente que no conoce el tema puede pensar, el veganismo y el vegetarianismo son dos corrientes alimentarias que si bien tienen en común que cuentan con muy diversas recetas de verduras dentro de su carta de preparaciones, en realidad tienen algunos detalles que las convierten en dos formas muy diferentes de alimentarse. Nos vamos a centrar en la dieta alimenticia que se conoce como veganismo.
El vegano se alimenta en exclusiva de productos de origen vegetal, por lo que no comen nada que no sea únicamente de este tipo. ¿Qué quiere decir esto? Pues que cualquier alimento que sea producido por un animal no se tolera en esta forma de comer, de modo que los huevos, la leche, el queso y hasta la miel de las abejas en algunas ocasiones están prohibidos cuando uno recibe una alimentación vegana. También evitan utilizar cualquier cosa que se haya conseguido mediante el más mínimo sufrimiento de algún animal, por lo que no llevan pieles, seda o lana, y hasta evitar utilizar determinados cosméticos.
Quienes defienden esta alimentación alegan que a base de recetas de verduras y frutas es posible estar sanos y bien alimentados, que se vive más tiempo y que se evitan muchas de las afecciones que hacen que el ser humano se ponga enfermo. Consideran comer carne como una especie de canibalismo intolerable y defienden que todos los seres vivos del planeta tienen el mismo derecho a vivir sin que nadie los mate por cualquier motivo.